Finalizan las
merecidas vacaciones de verano y a todos nos toca prepararnos para la vuelta a
la rutina. Comienza nuevo curso para los peques y es entonces cuando nos toca
enfrentarnos al periodo de adaptación. Ay, ay, ay… Un gran reto para ellos que
no quieren entrar en la guarde, que lloran desconsoladamente en la despedida,
que muestran rechazo y sufren ansiedad ante el desapego… y, también, para
vosotros, papas, yayos y otros familiares, que sabemos que sentís inseguridad,
culpabilidad por la separación, temor ante el cuidado que recibirá el niño@, en
definitiva, sentimientos habituales y normales que nosotras, las profes,
comprendemos y entendemos. Para tranquilizaros un poquito vamos a explicar qué
es eso del periodo de adaptación:
El periodo de
adaptación es el tiempo que cada niñ@ necesita, y que varía de unos a otros,
para adaptarse a una situación nueva, en nuestro caso, la incorporación a
nuestra guardería. Se trata de un proceso complicado para los pequeños ya que
supone la salida de su entorno familiar, el cual conoce a la perfección y que
le proporciona seguridad, protección y tranquilidad, y la entrada al
entorno escolar, un nuevo ambiente, que no conoce, en el cual no se siente
seguro, ni tranquilo y que, además, le provoca miedo y nerviosismo.
Debéis saber que
la incorporación al entorno escolar va a ser complicada pero que, tarde o
temprano, este proceso acaba y finalmente, todos los niños asimilan la
nueva situación y se adaptan.
Para
facilitar la incorporación de los niños a la guardería y agilizar la
finalización de este proceso las profes haremos lo posible durante estas
primeras semanas para que los niños, por sí mismos, encuentren en nuestro
espacio un lugar que les proporcione seguridad, confianza, tranquilidad y sobre
todo buenas dosis de diversión y felicidad.
La actitud que
la familia tenga en el periodo de adaptación es definitiva para que el proceso
no se demore ya que vuestros sentimientos se reflejan en vuestros niños. Debéis
estar seguros de que la guardería les aportará multitud de beneficios.
A continuación
os vamos a enumerar algunas orientaciones que pueden resultar útiles para este
periodo:
¢
Estar atentos a las necesidades que demande el
niñ@ para ofrecerle nuestra ayuda, comprensión y nuestro apoyo en todo momento.
¢
No actuar ante los niñ@s con inseguridad, duda o
culpabilidad por dejarlos en la escuela.
¢
No prolongar las despedidas en exceso.
¢
Antes de comenzar la asistencia del
pequeño conviene que vayáis adaptando los horarios de sueño y
alimentación a los que va a tener en la escuela para que comenzar a facilitarle
su incorporación.
¢
Organizaros de modo que no estéis nerviosos y
con prisas para que el niño vaya lo más tranquilo posible a la escuela.
¢
En los primeros días, el niño puede llevar
consigo algún objeto al que tenga cierto apego afectivo, para hacer más
agradable la adaptación al nuevo ambiente.
¢
Durante el período de adaptación, en la medida
de vuestras posibilidades, es conveniente que intentéis llevarle y
recogerle vosotros, ya que esto le dará seguridad y se acostumbrará antes
al cambio. Así mismo intentad ser muy puntuales en la recogida para que no
tenga sensación de desamparo cuando lleguen los demás padres.
¢
Procurad evitar que falten durante los
primeros días para que se adapten con mayor rapidez, y encontrar un
horario regular que el pequeño vaya a seguir todos los días para que conozca
sus rutinas y a través de ellas sus propios horarios.
¢
Cuando sea la hora de marchar es mejor no
alargar la situación: decir adiós con seguridad y alegría. Hay que transmitir
al niño que lo que estáis haciendo es lo mejor para él. Es importante que no
piense que la marcha de los padres es opcional o que si protesta con fuerza
impedirá la partida.
¢
Debemos evitar el chantaje afectivo de
“no llores que mamá se va triste”, o la mentira “voy a comprar y vengo
enseguida”, así como evitar al recogerle frases como “¡Ay pobrecito!, que le
hemos dejado solito”, ¿has llorado mucho?....
¢
Esperemos a introducir cambios en la vida
del pequeño (quitar pañales, cambio de habitación…) mientras se está adaptando
a la escuela para que pueda asimilarlos de uno en uno con más facilidad.
Para finalizar
recordaros que estamos a vuestra disposición para cualquier duda y os mandamos
fuerza y animo pero, sobre todo, os pedimos confianza.
Un fuerte
abrazo.
La verdad es que los comienzos siempre son duros en todo, pero contando con vuestra profesionalidad y con las ganas e ilusión que comenzais el curso, ¡¡¡miedos los justitos!!!
ResponderEliminarBesicos. Carmen
Cuando nos vais a poner fotos de los peques????? Ya tengo ganicas de ver lo que hacen.....
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